La ausencia

Ilustración de Juan Carlos Comperatore

Treinta radios convergen en el centro de una rueda, 

y es ese espacio vacío lo que permite al carro cumplir su función. 

Modelando el barro se hacen los recipientes, 

y es su espacio vacío lo que los hace útiles. 

Puertas y ventanas se abren en las paredes de una casa, 

y es el espacio vacío lo que permite que la casa pueda ser habitada. 

Lo que existe sirve para ser poseído. 

Lo que no existe sirve para cumplir una función. 

Tao Te Ching

La ausencia da lugar al vacío, y a veces el vacío da miedo, despierta sentimientos de incapacidad, de no valer, o de tristeza.

Sin embargo, valorar la ausencia supone valorar la presencia, porque no existe una sin la otra. “En el ser centramos nuestro interés, pero del no-ser depende la utilidad”. Valorar lo que eres significa también valorar lo que no eres. Valorar lo que tienes significa valorar lo que no tienes. 

A veces la vida se torna competición por ser y poseer, y la sociedad no es generosa con la ausencia. Y es por eso que nadie te enseña a celebrar la ausencia, a valorar lo que ya no está, porque estuvo; a quienes se marcharon y la ausencia que dejaron; lo que nunca fue o quién nunca estuvo en realidad, y el lugar que dejó, para que otras cosas crecieran. 

La vida y la muerte son dos estados distintos de una misma realidad. Transitar la ausencia de alguien o incluso la nuestra propia, puede vivirse como una pérdida, y también como una transición de un estado más de la vida propia. Y en realidad podemos vivir muchas cosas desde la ausencia, desde la carencia, o justamente al contrario, desde la presencia misma. 

Sobre la ausencia de felicidad… 

Que se manifiesta en la tristeza, el vacío, la ausencia, una depresión. A veces es la única forma en la que has sido capaz de conocer lo que necesitas verdaderamente, porque no lo tienes. Aquello que no tienes o crees no tener, aquello que has perdido o te falta en tu vida. Es una experiencia necesaria, para así llegar a encontrar otra posibilidad. 

Puede desembocar en éxito y fertilidad, o en fracaso y vacío de nuevo; pero es una forma de hallar las respuestas que estaban ausentes.

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